Dolomitas

Tengo que reconocer que esta es la parte que más ilusión me hacía del viaje a Italia. Al final la cabra tira al monte, y los Dolomitas tienen fama de estar entre las zonas montañosas más bonitas de Europa, sino la más; se venden como un paraíso para aquelloss que amamos las montañas. Ahora que las he visto con mis propios ojos puedo confirmar esto, la verdad es que lo que más sorprende de ellas es que son montañas muy estéticas, con picos y agujas muy pronunciadas. 

Los Dolomitas fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 2009. Aunque todo el norte de Italia es montañoso ya que toda su frontera está dentro de la zona de los Alpes, los Dolomitas solo es una zona situada al noreste del país transalpino, se extienden a lo largo de tres regiones italianas: Trentino/Alto Adiege, Veneto y Frili/Venecia/Giulia. Nosotros nos movimos por las dos primeras zonas y nos centramos en visitar los lugares más famosos, de todas formas a pesar de que estuvimos casi una semana nos dejamos bastantes cosas en el tintero, es una zona tan amplia que ni en un mes podrías conocer todo.

En la región de Trentino/Alto Adiege me sorprendió que la mayor parte de la población habla alemán, esto es debido a la influencia y cercanía a Austria, de hecho esta zona también se conoce como Sudtirol o Tirol del Sur. Mucha gente de la que vive aquí se consideran más austriacos que italianos.

Lunes, día 6 de septiembre
Habíamos marchado de Venecia por la tarde y nos dirigimos por la carretera que pasa por Belluno directos hacia el corazón de los Dolomitas. El primer lugar al que llegamos fue el Lago de Misurina, una auténtica obra de arte para los apasioandos de la fotografía de naturaleza. Es un lago muy bello y que además es muy fotogénico, desde el lado norte se consiguen hacer fotos con el circo de Sorapis de fondo y desde el lado sur se consiguen fotos con las Tre Cime di Lavaredo de fondo.

Nosotros llegamos justitos de tiempo, ya que queríamos llegar al parking de Auronzo antes del anochecer, así que echamos las correspondientes fotos desde las dos orillas y nos fuimos pitando, me penó el no haber estado más rato ya que es un lago muy llanito y agradable, de esos que te llaman a dar un paseo a su alrededor.

Desde el lado sur hacia el norte

Desde el lado norte hacia el sur

 
Al lado del lago Misurina está el desvío de la carretera que sube al  parking del refugio Auronzo y tras pasar la barrera que da cceso a ella llegamos bien de tiempo con la suerte además de encontrar un sitio en primera fila con vistas diáfanas hacia las cordilleras de enfrente. Tras echar unas fotos con el trípode del anochecer y hablar un poco con unos furgoneteros alemanes vecinos nos recogimos, aquí se notaba mucho la altura y ya hacía bastante frío.

Pasar la barrera de la carretera que da acceso al parking no es nada barato, pensábamos que nos costaría 45€ que es lo que cuesta cada día para las autocaravanas, pero tuvimos suerte y nos contó como furgoneta/turismo y por lo tanto "solo" pagamos 30€

Dormimos con estas vistas de fondo

Martes, día 7 de septiembre
Hoy tocaba hacer la ruta de senderismo más masificada de todos los Dolomitas: la ruta de Tre Cime di Lavaredo. Yo alucinaba mientras me desesperezaba y veía que a las 9 de la mañana no paraban de subir autobuses que traían turistas y montañeros desde el fondo del valle.

Hicimos la clásica ruta 101 que va desde el refugio de Auronzo hasta el refugio de Locatelli pasando por el refugio de Lavaredo. Nosotros además aprovechamos para salirnos del camino principal, que en realidad parece una autopista, un par de veces: una para llegar a unos monumentos a la Gran Guerra usando un camino que sale desde la ermita que hay en el tramo inicial y otra en el collado de Forcella para subir a una zona donde empieza una vía ferrata por las entrañas del Monte Paterno. Luego me hubiera gustado volver por el sendero 105 para dar la vuelta completa a las Tre cime di Lavaredo pero finalmente decidimos regresar por camino conocido. En total no salieron unos 12Km de distancia y 400 metros de desnivel.

A pesar de las multitudes de senderistas y turistas que te rodean durante todo el camino esta es una ruta increíble, las vistas de las Tre cime di Lavaredo son de esas que no olvidas en la vida. Además me gustó mucho como van cambiando según avanzas en la ruta y cambias de perspectiva.

Camino inicial en la inclinada ladera

Monumento de Guerra

Tre cime di Lavaredo desde la zona del Monte Paterno

Lagos detrás del refugio de Locatelli

Refugio Locatelli, fin de la ruta

 
Echamos la mañana entera haciendo la ruta ya que no lo tomamos con bastante calma, así que tras echar un refrigerio en el Refugio de Lavaredo y comer en la furgo seguimos el viaje por la tarde. Nada más cruzar la barrera de acceso al parking del refugio de Auronzo nos topamos con el Lago de Antorno, es muy pequeñito y menos espectacular que otros, pero en tan solo 10 minutos le das la vuelta. El que nos saltamos fue el lago di Dobiacco, ya que hoy queríamos llegar al lago di Braies y ya eran muchos lagos en un día.

Lago Auronzo

 
Sí que paramos en el Cementerio del Monte Piana, un lugar que no traía apuntado pero que vimos de repente y que no pillaba muy bien para parar a pie de carretera. Se trata de uno de los numerosos cementerios derivados de la 1ª guerra mundial que hay en esta zona donde hubo mucha leña, en este concretamente hay 1.259 tumbas de soldados.

Cementerio del Monte Piana

 
Finalmente llegamos al Lago di Braies tras pasar por unos pueblecitos rurales rodeados de verde que tenían muy buena pinta. Este lago probablemente sea el más buscado por los turistas, especialmente por los instagramers, a los que les encanta subir fotos a esta red social en la zona del embarcadero con las barquitas puestas en línea. Enseguida se nota lo famoso que es este lago por lo grandes que son los parkings de vehículos que hay en sus proximidades. 

Nosotros le dimos la correspondiente vuelta por la orilla (unos 4 Km llanitos quitando un tramo donde hay que subir y bajar un poco) y cuando llegamos a la furgo prácticamente ya se nos hizo de noche. En los parking vimos bastantes campers pernoctando pero nosotros preferimos irnos a un furgoperfecto que había en un pueblo cercano y que tenía pinta de ser mucho más tranquilo.

Lago di Braies (I)

Lago di Braies (II)

 
Miércoles, día 8 de septiembre
La verdad es que en la zona de Dolomitas vimos pocos pueblos, hoy precisamente nos tocaba ver uno de ellos: Brunico o Brunneck en alemán, este es un claro ejemplo de los núcleos de población con mucha influencia austriaca.

Realmente el pueblo no lo llegamos a ver, solo de pasada con la furgo, porque lo que hicimos aquí fue subir directos a la parte alta del pueblo donde está el castillo. Allí visitamos dos cosas: primero fuimos a ver el cementerio militar situado en una colina boscosa frente del castillo. Este cementerio nos pareció muy curioso porque en realidad representa un homenaje a la paz, las tumbas que hay aquí no son de soldados italianos, sino de soldados que combatieron en el bando enemigo: alemanes, austriacos, bosnios, serbios... y además cada tumba está hecha de forma que representa su credo religioso, porque ejemplo en las tumbas de los bosnios hay medias lunas árabes y también vimos tumbas con la estrella de David judía. Lo que más nos sorprendió es que vimos como una docena de mujeres de Brunico encargándose meticulosamente de cuidar el cementerio.

Cruzando el puente que lleva al cementerio

Cementerio de guerra de Brunico

 
Luego entramos a ver el castillo, aunque es un poco caro está bastante bien conservado, y además por dentro cuenta con exposiciones de objetos recopilados a lo largo de sus viajes por el mundo por Reinhold Messner, el famoso alpinista tirolés. Son unas cuantas plantas de exposiciones así que aquí estuvimos un rato grande.

Castillo de Brunico (I)

Castillo de Brunico (II)

 
De Brunico nos acercamos a San Genesio, un pueblo típico de estilo Tirolés, igualito que los que veíamos al otro lado de la frontera en el lado austriaco del Tirol. Aquí nuestro objetivo era subir a ver la Iglesia de Santa Barbara, situada unos cuantos metros más arriba del pueblo, en una empinada ladera. Nosotros dejamos la furgo en la parte baja del pueblo porque no veía nada claro subirla más arriba, así que luego nos tocó darnos una buena paliza para subir hasta la capilla. Pero la verdad es que tanto el camino como la propia capilla merecen mucho la pena, guardo muy buen recuerdo de esta parte del viaje. Muy cerquita de Santa Barbara está la vieja Iglesia de San Genesio, pero de esta solo queda el campanario.

Iglesia de Santa Barbara (I)

Iglesia de Santa Barbara (II)

Después nos tocaba volver al corazón de las montañas, para ello subimos hasta el Passo de Valparola, una zona donde el frente durante la I guerra mundial también estuvo muy activo. En todos los alrededores de este paso hay muchos lugares relacionados con ella. Nosotros entramos a ver el Museo de la Gran Guerra, un antiguo cuartel austriaco actualmente reconvertido a museo y donde se puede leer mucha información y ver muchos objetos y armas relacionados con la guerra en esta zona.

Museo de la Gran Guerra

 
Yo tenía ganas de haber echo alguna ruta esta tarde pero al final no vimos claro donde ir y nos conformamos con dar una vueltita alrededor del pequeño lago que hay junto al Passo de Valparola.

Lago Valparola

 
En el propio Passo de Valparola se puede pernoctar bien pero nosotros preferimos bajar al Passo Falzarego, muy cercano al primero y que nos pillaba mejor para el plan del día siguiente.

Passo Falzarego

 
Jueves, día 9 de septiembre
La idea de hoy por la mañana era subir mediante el funicular situado en el Passo Falzarego hasta el refugio Lagazuoi, en las inmediaciones del pico Lagazuoi; desde allí la cima del pico queda apenas a un cuarto de hora de sencillo paseo. Luego quería bajar a pata hasta el Passo Falzarego para pasar por una zona de abundantes túneles que realizaron los italianos para atacar las posiciones austriacas en lo alto del monte. También existe la posibilidad de hacer el camino por el interior de los túenels a través de una vía ferrata que debe ser bastante fácil. 

Refugio Lagazuoi

Pico Lagazuoi

Túneles en el monte Lagazuoi (I)

Túneles en el monte Lagazuoi (II)

Túneles en el monte Lagazuoi (III)

 
Isa se quedó esperándome en la furgo porque la bajada era bastante fuerte, unos 4,5Km con 650 metros de desnivel. Cuando llegué abajo marchamos hacia el Passo Giau, otro de los famosos puertos de esta zona. Cuando llegamos estaba lleno de coches aparcados por todos los lados, así que tuvimos que bajarnos por la carretera un rato y aparcar como pudimos en una zona de arcén.

Isa no se terminaba de encontrar bien así que tras comer juntos en el propio puerto se quedó otra vez esperándome y ya marché a hacer otra de las rutas de senderismo famosas de esta zona. Hice un recorrido de 10 Km y 550 metros de desnivel desde el Passo Giau hasta la zona de Cinque Torri, una zona de cinco pequeños picos muy estéticos. Hay formas más fáciles y rápidas de llegar a la zona de Cinque Torri, pero yo decidí hacerlo mediante este recorrido, que la verdad se me hizo más duro de lo previsto, imagino que el hecho de haber hecho hoy dos rutas de senderismo me acabó pasando factura.
La ruta en la ida la hice usando el camino 452 que me llevó hasta el refugio Averau, encima queda el refugio de Novelau, encaramado en lo alto de la montaña. Una vez en la zona de Cinque Torri y el refugio de Scoiatolli me encontré con mucha gente que subía hasta aquí usando el telesilla que parte desde cerca del Passo Falzarego.
Tras estar un rato husmeando en la zona de trincheras en las proximidades de Cinque Torri, muy interesante todo, me dispuse a volver por el otro lado de la montaña, usando el sendero 443 que pasa por el refugio Cinque Torri. En esta parte el camino hace unos cuantos sube y bajas bastante "rompepiernas".

Empezamos el camino en el Passo Giau

Refugio Averau

Ya veo las Cinque Torri

Trincheras de la WWI

Cinque Torri

Refugio Cinque Torri

 
Tras reunirme con Isa en el Passo Giau proseguimos camino, nos bajamos hasta Allegue, el que dicen que es el pueblo más bonito de los Dolomitas. A mi esta afirmación me parece algo exagerada, sí que es un pueblo curiosete por el hecho de estar junto a un lago, pero aparte de esto no me pareció que tuviera nada especial. Tras barajar otras opciones acabamos aparcando en el area de AC del pueblo, lugar que también usaríamos para dormir. Al pueblo le dimos una vuelta rápida a la que nos acércabamos para cenar en una pizzería del pueblo, el único lugar que vimos con un poco de ambiente en un pueblo que estaba bastante "muerto" a estas horas de la noche.

Allegue

 
Viernes, día 10 de septiembre
Hoy tocaba ir a hacer más senderismo, esta vez en el Passo Pordoi. Mi idea inicial era pasar por el Passo Fedaia, a los pies del glaciar de la Marmolada, el pico más alto de los Dolomitas y que tiene el único glaciar que aguanta en esta zona, pero el caso es que prefería llegar pronto al puerto para evitar atascos y problemas de aparcamiento, así que acabamos yendo directos usando la carretera que sube desde Corbara.

Una vez en el Passo Pordoi hicimos una de las rutas clásicas por la zona: una ruta de ida y vuelta hasta el refugio Viel de Pan. Nos salieron 8 Km con unos 250 metros de desnivel. Es un recorrido que para lo sencillo que es ofrece mucho, sobretodo en la parte final cuando el camino va a media ladera y vas viendo las vistas hacia el lago Fedaia y el glaciar de la Marmolada.

Inmenso rebaño de ovejas

Ya se ve al fondo el Embalse Fedaia

Marmolada

Refugio Viel de Pan

Parece que no tuve suficiente con la ruta realizada, así que mientras Isa me esperaba en la furgo, decidí subir al teleférico que sube al Sasso Pordoi y hacer una ruta desde allí hasta el cercano Piz Boe, un coloso de 3.152 metros que se ha convertido en el pico más alto que subo andando y el segundo tresmil que consigo tras haber subido la Vallibiera hace unos años. Tengo que reconocer que gracias al teleférico la ascensión al Piz Boe se convierte en una ruta mucho más sencilla; aún así sí que es cierto que no es una ruta apta para todos los públicos ya que tanto en la subida como en la bajada me tocó salvar unas zonas un poco críticas, aunque también es cierto que las zonas están aseguradas con clavijas, cables e incluso escaleras.

Yo hice la ruta que primero te baja hasta el refugio de la Forcella Pordoi, que es donde se conecta con los montañeros que se pegan la paliza de subir a pata desde el Passo Pordoi. Luego tocar elegir por donde subir al Piz Boe, yo subí por el camino directo y luego bajé por la cara opuesta que da hacia el Refugio Boe. En total me salieron 6,4Km y unos 400 metros de desnivel. Acabé un poco muerto porque lo hice en menos de 2 horas ya que fui con el turbo metido para que Isa no tuviera que esperarme mucho rato, que ya llevaba la mujer muchas esperas estos días.

Piz Boe al fondo

Refugio junto al Forcella Pordoi

Cima del Piz Boe, ¡abarrotada!

Tramo de descenso del Piz Boe equipado

 
Tras comer a unas horas un poco tardías en una pizzeria del propio puerto seguimos camino. La siguiente parada la hicimos brevemente en el Passo Sella. Aquí solo nos bajamos a echar unas fotos del entorno, especialmente desde aquí destacan los altivos picos del sector Sassolungo.

Passo Sella

 
El siguiente puerto cercano y famoso es el Passo di Gardena, el caso es que como andábamos un poco cansados y nos pillaba en dirección opuesta decidimos saltarnoslo también. Seguimos bajando por el Val di Gardena hasta llegar a Seis, allí reservamos sitio en un camping muy curioso: un camping de lujo donde el 99% de los vehículos tenían matricula alemana. El sitio era tan pijo que tenía hasta una máquina automática para lavar el potty... estos alemanes estirados no quieren ni ensuciarse las manos con su propia mierda. Mientras andábamos por allí noté que nos miraban bastante, imagino que se les hizo raro ver personas del sur de Europa por allí, parecía que les resultábamos como exóticos.

Sábado, día 11 de septiembre
Hoy tocaba subir a la zona conocida como Alpe di Susi, un altiplano enorme e idílico completamente cubierto de abundante hierba verde. Había visto muchas fotos de este sitio por internet y tenía muchas ganas de conocerlo. Aunque hay carretera para subir el uso de esta está restringido por horas, en estas horas hay un autobús que te puede subir pero no terminamos de ver claro como cogerlo, así que finalmente a Isa no le quedó más remedio que tomar el teleférico para subir, la pobre no es muy amiga de este medio de transporte pero finalmente se portó como una valiente.

Una vez arriba, en el lugar conocido como Compotsch, hay multitud de caminos para hacer, la mayoría de ellos sin mucho desnivel; la verdad es que esta zona me pareció perfecta para hacer senderismo en familia o incluso para hacer en bici. Nosotros improvisamos el recorrido sobre la marcha y fuimos tomando diferentes caminos señalizados hasta hacernos una ruta circular a medida. Nos salieron unos 7 Km de distancia con unos 200 metros de desnivel los cuales hicimos de forma muy relajada, disfrutando mucho del agradable entorno.

Alpe di Susi (I)

Alpe di Susi (II)

 
Tras la ruta entramos en la zona del valle principal por donde discurre la autopista que une Bolzano con Austria. Esta zona está mucho más humanizada y la verdad es que no tenía demasiada buena pinta,  yo tenía apuntado hacer varias paradas por aquí pero finalmente solo hicimos una parada en Chiusa para comer y dar una vuelta por el pueblo.

Chiusa

 
Como esta zona no nos estaba gustando mucho decidimos adelantar planes que teníamos para el día siguiente y nos fuimos directos al Val di Funes. Este es otro lugar que hace las delicias de los instagramers. Yo la verdad es que no le vi nada especial así  que nos fuimos directos hasta el fondo del valle para llegar al lugar que todo el mundo quiere fotografiar: la Iglesia de San Giovanni in Ranui. Es una iglesia con cúpula de cebolla en medio de un prado que se suele fotografiar con unos picos al fondo.
Para entrar a verla de cerca hay que pasar un torno que da acceso mediante el pago de monedas, yo también intenté fotografiarla desde el muro exterior pero no me gustó demasiado como estaban quedaban las fotos. La verdad es que nos fuimos del valle bastante decepcionados, el lugar nos pareció un poco "timo". La idea inicial era haber pernoctado por aquí pero preferimos irnos hasta el Lago di Carezza y dormir en un parking que hay un poco más arriba.

Iglesia de San Giovanni in Ranui

 
Domingo, día 12 de septiembre
Lo bueno de dormir aquí es que pudimos disfrutar del Lago di Carezza casi para nosotros solos, un lugar que siempre suele estar lleno de turistas. Solo tuvimos que bajar unos pocos kilómetros desde el parking superior hasta el propio parking de pago del lago. De todas formas el lago di Carezza no nos pareció gran cosa. Es un lago rodeado de coníferas de gran altura y es muy visitado debido al color de sus aguas azul verdosas, pero a nosotros no nos pareció para tanto. Para visitarlo basta con unos 15 minutos que es lo que cuesta darle la vuelta al perímetro aproximado de un kilómetro.

Lago di Carezza

 
 
En los Dolomitas aún nos faltaba de visitar Bolzano, la ciudad más grande de la zona, considerada como la capital de los Dolomitas.
Aparcamos en la calle en una zona gratuita pero cerca del centro, muy cerquita del Monumento fascista creado por Mussolini para recordar la victoria de Italia sobre Austria en la I guerra mundial. Desde allí nos dispusimos a recorrer esta ciudad con mucho ambiente y con influencia claramente germánica, dicen que de aquí para arriba es donde Italia empieza a parecerse a Austria. 

El primer lugar que visitamos fue el Museo Arqueológico de Tirol del Sur, casi integramente dedicado a Otzi, también conocido como el hombre de hielo, para el que no lo conozca se trata de la momia más antigua del mundo. Se encontró hace unos años congelado a más de 3000 metros de altura y gracias a eso se ha conservado especialmente bien.

Luego seguimo la visita a Bolzano viendo algunos de sus lugares más famosos como por ejemplo la Plaza Walther donde está la Catedral.

Tras comer en un Mc Donalds regresamos a la furgo dando un paseo por el parque Patrarca y pasando junto al Castillo Mareccio el cual es de propiedad privada por lo que no se puede visitar.

Monumento fascista WWI

Otzi

Calle principal

Catedral

Castillo Mareccio

Tras esta visita decidimos que había llegado la hora de abandonar los Dolomitas, Isa ya había tenido suficiente montaña y yo ya casi prefería volver a ver ciudades y publos más italianos, así que cambiamos el rumbo y pusimos dirección sur.

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