En mi reciente viaje a Tenerife tuve la suerte de completar uno de los hitos más importantes en mi curriculum montañero: ascender al Teide, que con sus 3.718 metros sobre el nivel del mar es el pico más alto de España.
Es cierto que lo hize en el "modo dominguero", es decir, usando el teleférico que ya te sube a 3.540 metros. Una vez aquí la ascensión ya es un sencillo paseo de poco más de un kilómetro entre subir y bajar hasta la cima, el cual no presenta ninguna dificultad ténica, aunque sí que el camino es bastante empinado.
La opción más montañera es usar el sendero de la Montaña Blanca el cual asciende desde las Cañadas del Teide pasando antes por el Refugio de Altavista.
Al estar en el centro de Tenerife, desde la cima, y si el día está despejado, hay una vista completa de 360 grados de la isla completa. Poco antes de llegar al punto más alto me soprendió el intenso olor a azufre, no en vano el Teide es un volcán que aunque lleva mucho tiempo inactivo, dentro de él mantiene todo su potencial. En la cumbre estuve poco rato porque como era de esperar estaba saturada de turistas y montañeros.
El acceso al pico está regulado por lo que para poder ascender hay que solicitar previamente por Internet un permiso al Gobierno. Yo lo solicité solo con un mes de antelación pero tuve suerte de que al estar en plena pandemia de Covid 19 no hay tantas solicitudes como en una época normal, sino, lo hubiera tenido que solicitar con mucha más antelación.
Al salir del teleférico justo donde se coge el camino de subida hay unos funcionarios que se encargan de solicitar el permiso a todos los que suben. Yo en realidad tenía el permiso para el día anterior pero como se había cancelado el teleférico por mal tiempo no me pusieron pegas.
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| Teleférico |
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| En la cima del Teide |
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| Teide (I) |
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| Teide (II) |