domingo, 23 de abril de 2023

Wild Atlantic Way

Tras recorrer el primer día del viaje la costa sur de Irlanda llegamos a Killarney donde empezaríamos la llamada Wild Atlantic Way, una ruta turística que recorrer de norte a sur toda la costa oeste de Irlanda, la más espectacular del país. Esto nos llevaría unos cuantos días del viaje ya que es una ruta muy larga y donde hay muchos lugares donde detenerse.

Domingo, día 9
Amanecimos en Killarney, y mientras Isa terminaba de preparase yo me di una vuelta por la zona de la catedral, me sorprendió la gran cantidad de gente que vi madrugando para acudir a misa, se nota que Irlanda es un país muy católico.

Catedral de Killarney

En los alrededores de Killarney hay unos cuantos lugares para visitar que pertenecen al Parque Nacional de Killareny, uno de los cinco que tiene el país. Todos ellos están muy cerquita entre sí:

  • Castillo de Ross: Una casa torre del siglo XV junto a un lago que solo vimos por fuera.
  • Abadía de Muckross: Típica abadía irlandesa abandonada y sin techo. Se llega tras un sencillo paseo de 10 minutos desde el parking.
  • Mansión Muckross: Bonita casa muy cercana a la abadía en la que nosotros nos conformamos con verla por fuera y también sus jardines
  • Cascada de Torc: Salto de agua en una zona de muchísima vegetación. Se llega en 5 minutos desde el parking aunque vimos que luego la gente seguía subiendo por un camino hacia más arriba, ignoramos donde iban.
Castillo de Ross

Abadía de Muckross

Mansión de Muckross

Cascada de Torc

Además de por todo esto Kilarney es famoso porque es el punto de inicio tradicional para hacer el anillo de Kerry, una carretera muy turística que da la vuelta a la península de Iverag, unas de las cinco que hay en el suroeste de Irlanda, las tres de abajo tenían buena pinta (Mizen, Sheep's head y Beara) pero nos las saltamos para solo visitar las dos superiores, la de Iveragh y la de Dingle, las dos más famosas. 

Empezamos el ring of Kerry en sentido horario, tal como recomiendan hacerlo. Primera parada en Ladies View, un mirador donde para todo el mundo que pasa por aquí. un poco más adelante está el Moll's Gap, un puerto de montaña donde apenas estuvimos fuera porque hacía un frío y un viento terribles.

Vistas del P.N. de Killarney desde Ladies View

Un frío que pela en el Moll's Gap

Luego avanzamos bastantes kilómetros hasta entrar en la zona más bonita, a partir de Waterville, un pueblo donde estuvo hospedado Carles Chaplin durante un tiempo. Cuando llegamos aquí ya nos llovía bastante así que visita breve también.

Waterville

Luego nos tocaba hacer el llamado anillo de Skellig, un mini anillo dentro del anillo de Kerry, el caso es que había tanta niebla y llovía tanto que no se veía nada y no sabíamos ni por donde íbamos. Tras subir una carretera horrible llegamos no sin pocas penurias hasta los llamadas acantilados de Kerry. Aquí estuvimos esperando un buen rato a ver si paraba de llover, pero no hubo manera, así que nos fuimos a verlos bajo el infierno de lluvia y niebla. Estos acantilados junto con de Moher (los más famosos) y los de Slieve League (los más altos), forman el trío perfecto.

Kerry Cliffs (I)

Kerry Cliffs (II)

Kerry Cliffs (III)

En frente de esta zona de costa están las islas de Skellig, que tenían una pinta buenísima, pero en esta fechas aún no salen barcos hacia allí, una pena.

Luego cruzamos el puente que nos llevaría a Valentia Island, allí hicimos la ruta de Bray Head. Unos 5 Km y 180 metros para llegar a una antigua torre de vigilancia situada en un lugar increíble. Esta ruta me gustó por esta parte final, el camino para llegar se hace monótono y aburrido.

Bray Head (I)

Bray Head (II). Al fondo se intuyen las islas Skellig

Para pernoctar decidimos ir a la playa White Strand, un sitio tranquilo, bonito, y que incluso disponía de baños públicos gratuitos.

White Strand

Lunes, día 10
Al poco de amanecer hicimos una breve parada en Cahersiveen para ver un curioso castillo de color blanco situado junto a un puente, un lugar al que le habíamos echado el ojo el día anterior mientras íbamos a la playa.

Cahersiveen

Seguimos avanzando por el anillo de Kerry pero esta vez ya sin parar hasta llegar a lugar que tenía muy buena pinta: el Gap of Dunloe. Se trata de un tramo de carretera por un entorno bucólico que se suele hacer andando, en bici o en carro de caballos, como está asfaltada también se puede hacer en vehículo motorizado pero es una carretera muy estrecha y la gente te mira bastante mal si lo haces así, nosotros decidimos hacerlo andando para evitar problemas. Se puede llegar un poco más arriba hasta la cabeza del puerto pero nosotros nos conformamos con llegar hasta el wishing bridge, nos salieron unos 9,5Km y 140 metros de desnivel. Un lugar muy original y creo que es la primera ruta que hago en mi vida completamente por asfalto.

Gap of Dunloe (I)

Gap of Dunloe (II)

Gap of Dunloe (III)

Gap of Dunloe (IV)

Por la tarde nos adentramos en la península de Dingle, tal como habíamos leído en Internet, tan o más espectacular que la de Kerry.

Antes de llegar al pueblo de Dingle paramos a comer junto a la larguísima playa de Inch, casi 6 Km de fina arena. Me reusltó curioso ver las buenas playas que tienen en Irlanda pero que apenas usarán debido al mal clima que padecen casi todo el año.

Inch Beach

Aunque Dingle es pequeñito, hace de epicentro de la península, aquí solo paramos para comprar un gorro para Isa. En esta zona había multitud de tiendas que vendían ropa y accesorios de lana, con tanta oveja pululando por la zona no me extraña.

Dingle

También hicimos una parada totalmente prescindible para ver la llamadas Beehive Huts, unas cabañas de piedra en las que hay que pagar 5€ para acceder y que el valor que tienen es que deben ser muy antiguas.

Beehive Huts

Dunmore Head sin embargo sí que es un sitio donde hay que parar sí o sí si se viene a Dingle. Además de ser un lugar espectacular de bonito tiene la curiosidad de ser el lugar más occidental de Europa.

Dunmore Head (I)

Dunmore Head (II)

Un poco más adelante está el puerto de Dunquin, otro sitio espectacular junto al mar donde se consigue una de las fotos que más furor hacen en Instagram.

Dunquin Pier

Nuestra intención para esta noche era cruzar el Connor Pass, el puerto más alto de Irlanda, para ya en la costa norte buscar lugar de pernocta, pero menos mal que fuimos atentos porque resulta que los vehículos anchos como el nuestro no pueden bajar por el lado norte del puerto. Total, que subimos el puerto por el lado sur y volvimos a bajar por el mismo lado para regresar a la zona de Dingle. 

Connor Pass

Aún nos dio tiempo para llegar hasta el camping de Tralee, ya necesitábamos parar en uno para recargar servicios de la furgo.

Martes, día 11
Tralee es un lugar que no hubiéramos visitado sino hubiéramos parado en su camping, la verdad es que es una ciudad que no tiene apenas atractivos. Además, el día estaba muy lluvioso, así que hicimos algunas compras y a seguir carretera.

Día muy lluvioso en Tralee

De camino a Moher hicimos una parada para comer en Adare, el que dicen que es el pueblo más bonito de Irlanda. Yo sinceramente lo único que le vi destacable es que tiene unas cuantas casas tradicionales con tejado de paja. Eso sí, aquí comimos estupendamente en un restaurante decorado como una casa clásica irlandesa, muy chulo.

Casa tradicional en Adare

Tras bordear Limerick, la que dicen que es la ciudad más peligrosa de Irlanda, y cuando más llovía, fuimos acercándonos a los acantilados de Moher, el lugar más famoso de Irlanda. Yo ya había estado aquí en un viaje anterior pero sería un delito pasar de largo sin pararse aquí de nuevo, y además Isa no los conocía.

Para no variar estos acantilados también los tuvimos que ver con mal tiempo, aún así la verdad es que no deja de ser un lugar espectacular. Más o menos estaban tal como yo los recordaba, ahora quizás aún más abarrotados de gente, y además, creo que han mejorado el camino peatonal que bordea los acantilados. Me hubiera gustado haber avanzado más hacia el sur pero soplaba tanto viento que nos resultó imposible seguir caminando más. 

Una curiosidad es que había llovido tanto que el agua acumulada en los acantilados se metía tierra dentro, es como si el agua fuera hacia al revés, un fenómeno muy extraño, no sé si es muy habitual aquí.

Acantilados de Moher (I)

Acantilados de Moher (II)

A última hora nos acercamos a Doolin, el pueblo donde se suelen alojar los numerosos turistas que visitan Moher. Vienen tantos que hay un pub en el pueblo llamado O'Connor's donde hay un ambiente espectacular. A pesar de haber muchos turistas me pareció un lugar muy auténtico, probablemente el mejor pub de todos los que entramos en el viaje. Además, el estofado de ternera a la Guiness que nos metimos entre peño y espalda fue memorable. La verdad es que este lugar será de los mejores recuerdos que me llevaré del viaje.  

Íbamos a dormir fuera del pub, pero seguía lloviendo y soplando tanto viento que decidimos movernos un poco para resguardarnos un poco detrás de una pared de un edificio en la entrada de Doolin.

Miércoles, día 12
A la mañana sigueitne mientras Isa se preparaba me fui a dar un paseito mañanero por Doolin, me encantó el entorno del pueblo. Fui andando hasta el O'Connor's Pub, el lugar donde tan bien lo habíamos pasado la noche anterior, me hizo gracia ver salir de allí un camión con deces de barriles de Guiness vacíos, una buena noche para muchos. También vi el camino que lleva hacia los acantilados de Moher desde el propio Doolin; el camino tenía una pinta buenísima, teniendo más tiempo me hubiera gustado haberlo recorrido En la zona también está el castillo de Doonagore, el cual yo solo vi desde el teleobjetivo de la cámara de fotos.

Calle donde está el O'Connor's Pub

Castillo de Doonagore al fondo

Luego nos tocaba atravesar la zona conocida como "The Burren". Un paraje extenso bastante extraño, es como un páramo con roca caliza intercalada entre la hierba. Allí paramos a ver el dolmen de Poulnabrone.

 Dolmen de Poulnabrone

Un poco antes de llegar a Galway está la abadía de Corcomroe: gratuita, abierta 24 horas y nos pillaba de paso, así que no había razones para no parar a verla.

Abadía de Corcomroe

Galway es un buen sitio para vistar, una ciudad grande y con mucho ambiente pero yo ya había estado en el anterior viaje así que seguimos camino hasta llegar a Cong. Este pueblito es famoso porque aquí se rodó la película ganadora de varios oscars "El hombre tranquilo", protagonizada por John Wayne y Maureen O'Hara. Además, merece la pena parar aquí porque hay varios edificios religiosos para visitar, aunque en estado bastante ruinoso. Tambien merece mucho la pena acercarse al río donde hay un bonito paseo entre puentes.

Cong (I)

Cong (II)

Cong (III)

Tras pasar un por un valle muy parecido a los que vi en Escocia hace años, llegamos a la zona del Parque Nacional de Connemara. Este fue uno de los lugares que me decepcionaron en el viaje. Para lo famoso que es me pareció uan zona montañosa muy normalita. El hecho de que la hierba por esta zona estuviera muy amarillenta tampoco ayudó. 

Aunque ya estaba cerrado nos acercamos al Centro de Visitantes, ya que desde este lugar salen las cuatro rutas de senderismo de diferente color. Yo quería haber hecho la de colro rojo que es la que sube hasta la cima de la Diamond Hill, pero Isa no tenía ganas de andar y finalmente me conformé con hacer la de color azul (lower diamond hill).

Ruta a Diamond Hill

Luego bordeamos el fiordo Killary, el único de Irlanda, y tras parar brevemente en Killary Harbour encontramos un tranquilo furgoperfecto a orillas del fiordo, un buen lugar para pernoctar.

Fiordo Killary

Jueves, día 13
Hoy retrocedimos unos kilómetros para vistar la abadía de Kylemore, uno de los lugares más famosos de Irlanda.

Actualmente es una abadía benedictina, pero se construyó como una casa palacio para la familia de Mitchell Henry, en la visita se cuenta la triste historia de esta familia y la verdad es que es una visita que aunque es un poco cara merece mucho la pena. Además de la casa también se puede dar un paseo a lo largo del lago para ver una pequeña iglesia neogótica y el mausoleo de la familia Henry. Un poco más alejados hay unos jardines a los que también se puede llegar en bus, esto nosotros no lo saltamos así que no puedo opinar sobre ellos.

Abadía de Kylemore (I)

Abadía de Kylemore (II)

Abadía de Kylemore (III)

Tras volver al fiordo killary paramos para hacer una visita relámpago a las cataratas Aasleagh, poca cosa me parecieron a mi.

Cataratas Aasleagh

Luego nos desviamos de la carretera principal para tomar una bucólica carretera entre montañas que nos llevaría de pleno al valle de Doo Lough, tras bordear un lago llegamos al memorial del hambre, un monumento dedicado los cientos de hombre y mujeres que murieron en esta zona tras la gran hambruna irlandesa. Un lugar muy desolado pero con un caracter especial.

Memorial de la hambruna en Doo Lough

Tras una buena kilometrada llegamos a Sligo, un pueblo famoso donde queríamos visitar unos cuantos lugares en sus alrededores. De primeras paramos en el Carrowmore Megalitic Center, el yacimiento irlandés con mayor concentración de túmulos y dólmenes por metro cuadrado.

Carrowmore Megalitic Center (I)

Carrowmore Megalitic Center (II)

Otro lugar a visitar en la zona de Sligo en la cascada de Glencar, situada muy cerquita de un lago. Aquí nos encontramos con un par de jóvenes españolas que estaba viviendo en Dublín y andaban por aquí de turismo, si no recuerdo mal fueron los únicos españoles que encontramos en todo el viaje.

Cascada de Glencar

Para pernoctar elegimos un camping que nos pillaba muy cerquita, en Rosses Point, un bonito lugar junto al mar. Por aquí me di un paseo en el atardecer que me encantó.

Playa en Rosses Point

Metal man

Anochece en el camping de Rosses Point

Viernes, día 14
Al norte de Sligo hay una zona con unos profundos valles y unas estéticas montañas, todo rodeado de un color verde muy intenso, más que en otras zonas de Irlanda. Por ello me gustaría haber contado con más tiempo para haber explorado esta zona más a fondo pero finalmente nos conformamos con recorrer con la furgo la llamada "Glenariff Horseshoe", una carretera circular que rodea uno de los valles más escénicos de la zona. Tranquilidad absoluta y un auténtico placer conducir por aquí.

Glenariff Horseshoe (I)

Glenariff Horseshoe (II)

Luego hicimos un parada junto al mar para ver un lugar llamado fairy bridges, unos puentes de roca junto al mar. Me pareció un lugar que no está mal, pero prescindible.

Fairy bridges

Inicilamente no lo teníamos previsto peor acabamos parando en el pueblo de Donegal, el cual da nombre al extenso condado que está situado al noroeste de Irlanda y que junto con Irlanda del Norte forman la región histórica conocida como Ulster.

Donegal es un pueblo pequeñito pero agradable, el lugar más famoso es el castillo, el cual pudimos visitar por dentro. Tras comer en un pub del centro y hacer compra en el super del pueblo seguimos viaje.

Donegal

Castillo de Donegal

Pro la tarde fuimos a los acantilados de "Slieve League" o "Sliabh Liag" en idioma célta, este condado de Donegal nos pareció que era unas de las zonas más cerradas en cuento a tradiciones irlandesas, ¿quizás por su cercanía con Irlanda del Norte?, no lo sé.

Estos acantilados, con 601 metros son los más altos de Irlanda y en algunas webs he leído que también los más altos de Europa, aunque este galardón ya se lo han otorgado a varios lugares más, así que no sé que pensar al respecto. Lo que es cierto es que son más del doble de altos que los de Moher.

Nosotros para visitarlos llegamos hasta el parking inferior y subimos hasta el parking superior a pie, en total son casi 2 Km por asfalto, con cierto desnivel, aunque el paseo se hace bonito. junto al parking superior está el Bunglass Point, el mejor mirador para ver los acantilados. El camino sigue para subir hasta la parte más alta de los acantilados, pero nos pareció que no merecía mucho la pena así que solo subimos un tramo.

Camino a los acantilados Slieve League

Acantilados Slieve League

Señal de Eire 71

Desde aquí seguimso hacia el norte cruzando otra zona muy remota en la que parecía que se acaba el mundo y que nos llevó cruzar el Glengesh Pass, un bonito puerto en su lado norte. 

Glengesh Pass

Tras bajar el puerto tomamos una carretera estrechísima para ir en busca de la cascada Asaranca. La cascada en sí no nos pareció nada del otro mundo, pero a cambio pasamos por unos sitios junto al mar chulísimos, tanto nos gustaron que nos bajamos de la furgo para recorrer algún tramo de carretera a pie.

Cascada Asaranca

Bonitos parajes cerca de la cascada de Asaranca

La pernocta la hicimos en parking de Ardara, un pueblito muy tranquilo donde encontramos un pub llamado Nancy's donde echamos unas Guiness bien a gusto.

Nancy's (I)

Nancy's (II)

Sábado, día 15
El plan para hoy era haber visitado el Parque Nacional de Glenveagh, pero como pillaba un poco a desmano y no parecía muy espectacular, al final decidimos irnos ya directos a Derry para empezar nuestro viaje por Irlanda del Norte. Un poco antes de entrar hicimos una parada en una colina cercana a Derry donde está el Grianán de Ailech, un curioso fuerte de piedra totalmente circular, con unas dimensiones de 23 metros de diámetro, 5 de altura y 4 de grosor.

Grianán de Ailech