Este fin de semana lo hemos dedicado a visitar Atapuerca, uno de los yacimientos arqueológicos y paleontológicos más importantes de Europa; además de Homo Sapiens, nuestra especie, aquí se han encontrado resto de hasta cuatro especies de homínidos más. La visita la hemos acompañado con una visita a Burgos, que pilla muy cerquita, a unos 14Km, entre otras cosas allí queríamos visitar la Catedral, ya que Isabel aún no había estado, y sobretodo el MEH (Museo de la Evolución Humana), el complemente perfecto a Atapuerca.
Sábado, día 27
No madrugamos y llegamos a Burgos a la hora de comer. Decidimos aparcar en el parking que hay en el castillo, muy cerquita del centro, aunque luego para volver hay que subir una buena cuesta.
El castillo debe tener poco valor así que obviamos su visita. Nosotros empezamos visitando la Catedral, para ello bajamos del castillo pasando junto a las Iglesia de San Esteban y de San Nicolás de Bari. La visita a la Catedral es un imprescindible en Burgos, ya que junto a la de León están consideradas como las dos catedrales góticas más bonitas de España. Aparte del conjunto en general algunas cosas a destacar de la catedral son la puerta de Sarmental, el papamoscas, la escalera dorada, la capilla de los condestables o la tumba del Cid Campeador.
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| Catedral de Burgos (I) |
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| Catedral de Burgos (II) |
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| Catedral de Burgos (III) |
Luego pasamos por debajo del Arco de Santa María y ya aprovechamos para entrar a verlo por dentro. Ya en el paseo del Espolón seguimos el cauce del río Arlanzón para acabar llegando al MEH, el Museo de la Evolución Humana. Si se pretende ver Atapuerca es importante ir primero a este museo para enterarse bien de lo que representa este importante yacimiento arqueológico. El museo está dividido en tres plantas y un sótano en las que además de profundizarse en el yacimiento de Atapuerca también se explican temas más variados como la evolución humana en general, los ecosistemas de la antiguedad o el funcionamiento del cerebro humano. Al menos conviene preveer una hora y media de tiempo para verlo. Lo más importante del MEH está en el sótano, ya que aquí se custodian las piezas más importantes encontradas en Atapuerca, por ejemplo el craneo de chico de la Gran Dolina o la pelvis "Elvis", nos echamos unas risas con su original nombre.
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| Exterior del MEH |
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| Interior del MEH |
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| Pelvis "Elvis" |
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| Uno de los craneos encontrados en Atapuerca |
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| Miguelón, un Homo Heidelbergensis |
Tras la visita al MEH volvimos al centro para pasear por las calles y plazas más céntricas, impresionantes como siempre lugares como la Casa del Cordón o la Plaza Mayor, por cierto, allí mismo acabamos cenando en una cadena "Taco Bell".
Regresamos a la furgo de noche cerrada y así pudimos disfrutar de la Catedral iluminada y de la vista nocturna de la ciudad desde el mirador que hay en la zona del castillo.
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| Catedral iluminada |
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| Vista nocturna de Burgos desde el mirador del castillo |
Cuando llegamos al parking para dormir nos sorprendió que unos vecinos campistas nos comentaron como que ahí no se podía dormir porque la policía multaba, ello se iban a trasladar al area de AC que hay en el barrio de Gamonal, al parecer el único sitio donde se puede pernoctar en la ciudad. Una vez en el area de AC nos enteramos de que esto debía ser cierto ya que el Ayuntamiento de Burgos ha debido de sacar recientemente alguna normativa específico al respecto.
Domingo, día 28
Teníamos la visita guiada a Atapuerca a las 12,30h, así que aprovechamos el comienzo de la mañana para acercarnos a visitar la Cartuja de Miraflores, situada en la zona de Fuentes Blancas, y la cual se me quedó pendiente en el anterior viaje.
Mientras Isa esperaba a que los turistas pudiéramos entrar a la Cartuja yo aproveché para dar un corto paseo hasta la zona de ribera de Fuentes Blancas, me pareció un parque chulo al que tengo ganas de recorrer, pero con bicicleta, eso ya será en otro viaje...
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| Fuentes Blancas |
La Cartuja está bien, la visita es gratuita y se ve rápido, aquí lo más destacado probablemente sea la tumba de los padres de Isabel la Católica.
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| Cartuja de Miraflores |
A Atapuerca llegamos bien de tiempo así que antes de coger el bus que nos llevaría a la zona de yacimientos nos dio tiempo a husmear el edificio del Centro de Recepción de Visitantes. Lo que no hicimos fue visitar el CAREX, otro museo que se suele visitar en Atapuerca pero que a mi me pareció más para ir con niños.
La zona de yacimientos está muy próxima al Centro de Visitantes, aproximadamente un par de kilómetros, está situada a lo largo de la llamada trinchera del ferrocarril, un tajo en la roca hecho por el hombre en el S XIX para permitir el paso del ferrocarril minero que entonces operaba por aquí. Gracias a este hecho se pudieron descubrir los yacimientos de Atapuerca.
Una vez allí nos recibió nuestra guía, la cual nos explicó con detalle las tres zonas que son visitables: la gran dolina, la galería y la sima del elefante. Realmente hay bastantes más zonas de excavación, pero solo se visitan estas tres, al menos actualmente. En la visita realmente no se ve nada especialmente vistoso ya que de los tres yacimientos apenas se ve nada aparte de los andamios y algo de las obras de excavación, pero todo muy superficialmente.
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| Atapuerca (I) |
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| Atapuerca (II) |
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| Atapuerca (III) |
Para acabar el día nos acercamos a Castrillo del Val a hacer una corta ruta de senderismo de unos 7 Km de distancia y apenas 100 metros de desnivel. Es una ruta que transcurre entre campos de cereal y encinas y que la mayor gracia que tiene es poder ver tres cuevas del llamado valle de "Valdecuevas": la cueva del carrascal, la cueva del Belén y la cueva carrera. La más bonita sin duda es la primera de ellas.
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| Bucólicos campos alrededor nuestro |
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| Cueva del Carrascal |
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| Cueva del Belén |
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| Cueva Carrera |
Lo peor de la ruta fue la marabunta de moscas que nos estuvieron persiguiendo durante toda la parte intermedia del recorrido, además, cuando aún nos faltaban un par de kilóemtros para regresar al pueblo nos acabó pillando una tormenta que venía desde el sur.
