Debido a su sencillez el fotografiar la luna es una de las prácticas que primero se hacen cuando se está empezando a aprender fotografía.
Yo todavía no lo había hecho porque quería practicarlo una noche de luna llena y por una razón u otra ninguna noche de ellas me venía bien, el caso que hoy por fin he podido hacerlo. Me he acercado al Parque San Miguel, cerquita de casa, y una vez allí he buscado un sitio un poco alto para plantar el trípode.
A continuación pongo unas cuantas recomendaciones a tener en cuenta para fotografiar la luna correctamente:
- Buscar noches con luna nueva y sin nubes.
- Buscar un lugar alto y que no tenga contaminación lumínica.
- Esperar a que sea noche cerrada.
- Usar un teleobjetivo con la máxima distancia focal posible para sacar la luna lo más cerca posible.
- Usaremos el modo medición puntual de luz apuntando a la luna.
- Usaremos un enfoque manual hacia el infinito (un poco antes que el extremo final del anillo).
- Poner el modo manual completo sin prioridades.
- Usar una ISO baja para evitar ruido.
- Usar una apertura de diafragama bastante cerrada para que salga bien definida.
- Usar una velocidad de obturación bastante rápida (no por debajo de 1/200) porque la luna se mueve rápido.
- Disparar sobre trípode y con disparador automático o retardo.
Aquí abajo pongo un par de fotos de lo que dio la noche, me hubiera gustado haber sacado alguna otra silueta de acompañamiento pero desde el lugar donde estaba no pude hacerlo.