Primero hemos parado en Briones, un pueblo eminentemente bodeguero en el que el vino es la principal y casi única fuente de riqueza.Además de callejear por el pueblo visitamos lo poco que queda del antiguo castillo, la Iglesia de Nª Señora de la Asunción, la Ermita del Cristo y también entramos al Palacio del Marqués de San Nicolás donde además de estar situado el Ayuntamiento también se puede visitar un museo llamado "La Casa Encantada", este museo representa como era una antigua casa de La Rioja.
La siguiente parada la hicimos en Haro, la capital del vino de Rioja.
Lo primero que hicimos fue ir a visitar la Estación Enológica, ahí está situado el Centro de Interpretación del Vino de Rioja. Junto a él está situada la Ermita de la Virgen de la Vega.
Después nos acercamos a la Plaza de la Paz, punto neurálgico de la ciudad desde donde accedimos a la zona de pinchos conocida como "La Herradura". Después de recorrer unos cuantos bares y llenar la barriga nos acercamos a ver la Iglesia Parroquial de Santo Tomás pero estaba cerrada.
La última parada del viaje la hicimos en Casalarreina.
El monumento más famoso del pueblo es el Monasterio Dominico de Nª Señora de la Piedad pero también nos lo encontramos cerrado así que dimos una vuelta por la zona del río y ya regresamos para el coche.
Monasterio Dominico de Nª Señora de la Piedad