Gran viaje a Andalucía

Andalucía es un Comunidad Autónoma a la que me cuesta viajar por aquello de la lejanía, el caso es que este año juntando con la Semana Santa hemos conseguido juntar quince días para poder hacer un gran viaje. Estas dos semanas han dado bastante de sí ya que hemos podido visitar bastantes puntos que tenía anotados como pendientes, además de darle un buen repaso a Andalucía también aprovechamos para hacer alguna vista en el regreso de unos cuantos puntos pendientes de Cáceres y Salamanca.

Entramos en Andalucía por Despeñaperros, provincia de Jaén y tras pasar rápidamente por la provincia de Córdoba llegamos a Málaga y Cádiz donde hicimos unas cuantas visitas, luego visitamos Sevilla como gran ciudad y ya en la segunda mitad nos centramos en la provincia de Huelva, donde creo que visitamos los lugares que más nos gustaron; la salida la hicimos por la famosa autovía de la vía de la plata para hacer unas paradas en Cáceres y Salamanca.

En principio abril es una buen mes  para hacer este viaje, tuvimos calor pero no sofocante, y aunque nos llovió algún día, tampoco fue exagerado. 

En cuanto a la pernocta comentar que hubo zonas donde echamos en falta más areas de AC, en el norte estamos acostumbrados a encontrar muchas más.

Domingo, día 3
Salimos por la tarde para ir acerándonos hacia Andalucía. Llegamos a pernoctar en un area de AC libre en el pueblo de Cabañas de Yepes, en la provincia de Toledo.

Pernoctando en Cabañas de Yepes

Lunes, día 4
Tras pasar Despeñaperros entramos en Jaén y enseguida hicimos una parada en Baños de la Encina, un pueblo que figura en la lista de "Pueblos más bonitos de España". Dimos una vuelta por el pueblo el cual no nos gustó demasiado y enseguida subimos a ver el castillo, el lugar más famoso de la villa. Se trata de un castillo con mucha historia y que ha pasado por varias fases muy diferenciadas tal como nos explicaron en la visita guiada que hicimos.

Baños de la Encina

Castillo de Baños de la Encina

Pro la tarde cambiamos a la provincia de Córdoba y allí hicimos la visita a otra localidad de la lista de pueblos más bonitos de España, en este caso Zuheros; este pueblo sí nos gustó más. Es muy recomendable hacer el paseo por el parque periurbano el cual aunque es corto es muy agradable, se pasa incluso por varias pasarelas y puentes colgantes. El pueblo también es muy bonito, con varios miradores como el de Escominillas o el de la Villa, y donde también destaca la figura del castillo al que no pudimos entrar por estar ya fuera de horario. Aquí también estuvimos cotillenado la maquinaria de la cooperativa de aceitunas que hay en la parte inferior del pueblo.

Pasarela en el parque periurbano de Zuheros

Calle decorada de Zuheros

Vistas de los alrededores de Zuheros

Castillo de Zuheros

 
A última hora llegamos a Antequera, Málaga. Allí teníamos bastantes visitas para hacer pero eso ya sería al día siguiente. Aparcamos en el area de AC del pueblo y nos fuimos a cenar a un restaurante Chino mientras ya veíamos llegar las nubes de la esperada borrasca.

Martes, día 5
Tal como esperábamos amanecimos en Antquera lloviendo bastante. Aún así no nos amilanamos y nos fuimos hasta el centro de la ciudad a ver su casco histórico. Una de las primeras cosas que visitamos fue el MVCA, el Museo de la Ciudad, el cual era gratuito; esta es una buena cosa para hacer sobretodo en un día lluvioso como el que tuvimos. Lo más destacado del casco histórico es la Alcazaba, allí destacan el Arco de los Gigantes que es la puerta de entrada principal y la Real Colegiata de Santa María la Mayor. Nosotros hicimos la visita con la audioguía y la verdad es que muy bien, es un sitio para visitar con calma ya que es grande.

Plaza en Antequera

Museo de la Ciudad de Antequera

Alcazaba

Vistas de Antequera desde la Alcazaba

A la tarde nos desplazamos con la furgo hasta las afueras de la ciudad para ver los Dólmenes de Antequera, los cuales están declarados como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, para mi son los dólmenes más grandes que he visto en mi vida.
Los dólmenes de Viera y Menga están en el recinto principal donde conviene primero pasarse por el Centro de Interpretación donde te explican muy bien la historia de estos. Unos kilómetros más allá está el tercer dolmen, el llamado "Tholos de el Romeral".

Dolmen de Menga (I)

Dolmen de Menga (II)

Dolmen de Menga (III)

 
Tras acabar con esta visita dudamos en si subir o no al Torcal de Antequera, un paraje montañoso famoso por las curiosas formas de las rocas. Como ya parecía que empezaba a aclarase algo la tarde finalmente decidimos subir por la tortuosa carretera y la jugada nos salió bien ya que aunque pillamos todo muy mojado ya no nos llovió más. Además, tuvimos la suerte de verlo a una hora donde la mayor parte de las hordas de turistas ya se habían ido.

Tras hacer una breve parada en el mirador Diego Monea desde donde se veía hasta la costa de Málaga aparcamos en el parking último el cual suele estar atestado de coches. Desde allí salen las dos rutas más famosas que se suelen hacer aquí, la verde de 1,5Km y la amarilla de 3Km; nosotros no conformamos con la verde que es como la amarilla pero atajando por la mitad, son muy fáciles ambas pero el terreno estaba muy resbaladizo ya que gran parte de la ruta se hace sobre piedra muy pulida y hoy había llovido mucho. Importante no irse del lugar sin ver el mirador de las Ventillas el cual está situado muy cerquita del propio parking.

A mi el sitio me gustó, pero nos me pareció para tanto como se suele decir de él, quizás he visto ya unos cuantos lugares parecidos a este. 

Torcal de Antequera (I)

Torcal de Antequera (II)

Tras acabar con todas las visitas de Antequera nos desplazamos hasta la zona donde comienza el caminito del Rey del cual teníamos reserva para el día siguiente. El lugar está muy cotizado y aunque no hay apenas plazar para furgonetas grandes conseguimos un sitio muy bueno junto a la cabecera del embalse de Conde de Guadalhorce. Es un sitio que me transmitía buenas sensaciones y decidí dar un pequeño paseo nocturno por la presa, junto a ella está el llamado Sillón del Rey donde el 21 de mayo de 1921 el rey Alfonso XIII firmó el acta de finalizacion de las obras de construcción de la presa.

Embalse de Conde de Guadalhorce

Miércoles, día 6
Hoy tocaba hacer el caminito del Rey, una de las rutas senderistas más famosa de España; sobretodo se hizo famosa en su día gracias al camino antiguo el cual era muy peligroso ya que pasaba por pasarelas en muy mal estado, hace unos años se restauró y hoy por hoy es una ruta apta para cualquiera que no padezca de un vértigo exagerado.

Teníamos la entrada que habíamos reservado hacía aproximadamente un mes a las 9h, así que madrugamos bastante para hacer los 2,7 Km que teníamos que hacer previos hasta donde está el control de entrada, allí presentas el ticket y te dan un casco que devuelves al acabar el recorrido. De los 7,7 Km totales que se recorren en realidad por dentro de las pasarelas solo se hacen 2,9 Km. 

La ruta es muy espectacular, no tanto en el primer desfiladero, el que corresponde al embalse de los Gaitanejos, sino sobretodo en el tramo final de cortados, justo antes de llegar al Chorro, que es donde te recoge el autobús para devolverte al punto de inicio.

Tanto Isa como yo salimos muy satisfechos de la ruta, la verdad es que en este caso la realidad está a la altura de las altas espectativas con las que se suele venir.

Caminito del Rey (I)

Caminito del Rey (II)

Caminito del Rey (III)

Caminito del Rey (IV)

Luego entramos en la provincia de Cádiz con intención de visitar los famosos pueblos blancos, son un total de 19 pueblitos pero nosotros nos conformamos con visitar cinco de ellos, los que vimos que más se repetían en Internet como recomendamos.

El primero de ellos fue Olvera. Recorrimos la calle Llana que nos llevó directos a la zona alta donde están la práctica totalidad de atractivos del pueblo: la Iglesia, la Casa Cilla donde está el museo "La frontera y los castillos", el cementerio y el castillo nazarí.

Olvera (I)

Olvera (II)

Olvera (III)

Siguiente parada en el pueblo blanco que más nos gustó: Setenil de las Bodegas. En este pueblo lo que más destaca son las calles Sol y Sombra, dos calles paralelas que tienen las casas cueva construidas aprovechando la pared de la montaña. Aparte de esto el pueblo es muy agradable de recorrer.

Setenil de las Bodegas (I)

Setenil de las Bodegas (II)

Setenil de las Bodegas (III)

Para dormir nos acercamos a le entrada del yacimiento romano de Acinipio, para pernoctar junto a su puerta. Un lugar sin demasiado encanto pero muy tranquilo ya que está en medio de la nada.

Jueves, día 7
Isa se quedó durmiendo un poco más en la furgo mientras yo entraba a hacer una vista rápida a Acinipio a primera hora. La entrada es gratuita pero yo no vendría hasta aquí si no voy muy sobrado de tiempo. De las ruinas lo único que se conserva mínimamente es el teatro.

Ruinas romanas de Acinipio

Luego nos salimos brevemente de Cádiz para volver a entrar en Málaga y visitar Ronda, un pueblo que teníamos que visitar sí o sí pasando tan cerquita de él. De Ronda lo más famoso es el altísimo puente nuevo pero en realidad todo el pueblo al completo merece una visita detenida.

Nosotros entramos por el sur y usamos la puerta de la Cijara para entrar en la zona histórica. La primera visita que hicimos y una de las que más recordaremos del viaje fue la llamda "Casa del Rey Moro". Se trata de una casa donde además de los jardines se visita la llamada mina de agua, en ella se bajan un montón de viejos escalones, unos doscientos, hasta llegar al curso del río, en el fondo del enorme tajo que atraviesa Ronda; cuando sales de la oscuridad de casa y ves donde estás alucinas bastante.

Tras contemplar la zona del puente viejo y los baños árabes desde arriba cruzamos el río para en el otro lado remontar los llamadas jardines colgados de Cuenca. Ya en el lado norte callejeamos por la zona comercial, vimos por fuera la plaza de toros y recorrimos el paseo de los ingleses y el de San Blas hasta toparnos con el enorme puente nuevo, 100 metros de altura tiene este puente construido en 1793 y que salva el profundo tajo que atraviesa Ronda de extremo a extremo. Ya en el otro lado bajamos un poco para ver el puente nuevo desde el mirador más famoso donde solemos ir todos los turistas a echar la típica foto. Finalmente acabamos la visita a Ronda en la plaza de la Duquesa de Parcent, la más famosa de la ciudad y donde hay importantes edificios.

Interior de la "Casa del Rey Moro" (I)

Interior de la "Casa del Rey Moro" (II)

Panorámica de Ronda (I)

Panorámica de Ronda (II)

Puente Nuevo

Otro pueblo famoso de esta zona de la Serranía de Cuenca en Juzcar, el pueblo pitufo, en realidad parece ser que su único atractivo es tener las casas pintadas de azul en vez de blanco así que decidimos obviarlo y volvimos a Cádiz a seguir con nuestra ruta por los pueblos blancos. 

Este día aún nos dio tiempo a llegar a Zahara de la Sierra otro pueblo en alto a orillas de un embalse y enclavado dentro del Parque Natural de Grazalema. Una de las curiosidades de este parque es que por lo visto este es el lugar donde más llueve de España, yo lo flipé bastante cuando lo leí. En Zahara no llegamos a subir a la zona del castillo pero callejeamos bastante por el pueblo. Aquí también visitamos el jardín de los pinsapos, un tipo de abeto que solo crece en el sur de España y en el norte de Marruecos. También decidimos quedarnos en este pueblo a pasar la noche en la furgo.

Zahara de la Sierra (I)

Zahara de la Sierra (II)

Viernes, día 8
Salimos de Zahara para seguir viaje hacia Grazalema a través de la famosa carretera que une ambos pueblos. De camino hicimos unas cuantas paradas en esta tortuosa bonita carretera de montaña. 

Puerto de los Acebuches

Puerto de las Palomas

Llanos del Campo

Una vez aparcados en Grazalema dimos una vuelta por el pueblo que a mi realmente no me gustó demasiado y también recorrimos los 600 metros que se conservan de la calzada medieval.

Grazalema

Calzada medieval en Grazalema

No nos podíamos irnos de Grazalema sin hacer una ruta de senderismo, tal como pudimos contemplar hay muchísimas por todos los sitios del parque, nosotros nos decantamos por la ruta del río Majaceite, una de las famosas. Se trata de una sencilla ruta de 10 Km llanitos que une las localidades de El Bosque y Benamahoma siguiendo el curso del río el cual cruzaremos múltiples veces gracias a unos pequeños y curiosos puentes metálicos.

Ruta del río Majaceite

Por la tarde llegamos a Arcos de la Frontera, el último de los pueblos blancos de Cádiz que visitaríamos. Este la verdad es que es bastante diferente a los otros pueblos que vimos. Es más grande y quizás no sea tan bonito, pero a mi me pareció un pueblo muy original. A destacar sobretodo la plaza del Cabildo donde están el castillo (de propiedad privada, no se puede entrar), la basílica de Sta Mª de la Asunción, el Ayuntamiento y el mirador más famoso del pueblo.

Arcos de la Frontera (I)

Arcos de la Frontera (II)

Esa noche pernoctamos en Arcos de la Frontera, en un parking de tierra alejado del centro y que no daba demasiada confianza...

Sábado, día 9
Según se iba acercando la Semana Santa más ambiente íbamos encontrando por las calles, de hecho en Arcos de la Frontera ya lo notamos bastante. El caso es que nuestra siguiente parada era para conocer Sevilla, una ciudad que esperábamos encontrar hasta los topes de gente y en la que además las areas de AC brillan por su ausencia, y las que hay están bastante mal valoradas. Total que decidimos saltarnos la visita a Itálica e ir directamente al camping de Dos Hermanas a primera hora para coger sitios cuanto antes. 
El camping estaba alejado del centro de Sevilla y era un poco decadente pero al menos teníamos un buen sitio para descansar, descargar y cargar agua para la furgo, y además, con un autobús para movernos hasta Sevilla.

Tras descansar por la mañana y comer en el camping por la tarde nos acercamos a Sevilla. Esa tarde hicimos la visita a la Giralda, la Catedral de Sevilla, la cual es famosa por su torre que aún se mantiene de la original mezquita y desde donde hay muy buenas vistas de la ciudad. Dentro de la Catedral también destacan su retablo mayor y la tumba de Cristóbal Colón.

Puerta del Perdón en la Giralda

Tras esta visita tomamos la calle Sierpes, una de las más famosas calles comerciales. Esta nos llevó hasta la plaza donde está el Ayuntamiento. También visitamos la Iglesia del Divino Salvador y la enorme estructura de "las Setas", un curioso edificio de madera en pleno centro de la capital andaluza. Tras callejear un poco por el céntrico barrio de Santa Cruz y probar algún vino de Jerez que me supo a rayos acabamos en Plaza España, uno de los lugares más famosos de la ciudad. Allí estuvimos entretenidos observando los diferentes bancos dedicados a todas las provincias españolas.

"Las setas"

Barrio de la Santa Cruz

Plaza España

Domingo, día 10
Hoy era Domingo de Ramos y nos tocaba seguir visitando Sevilla. A las 10h teníamos visita reservada a los Reales Alcazares, uno de los monumentos más destacados de la ciudad y que a mi creo que fue lo que más me gustó, me recordó mucho a la Alhambra de Granada. 

Reales Alcazares (I)

Reales Alcazares (II)

Reales Alcazares (III)

Tras estar cerca de dos horas visitando los Reales Alcazares entramos al Archivo de Indias, otro de los edificios imporantes a visitar de Sevilla y cuya entrada es gratuita. En este lugar se conservan los documentos relacionados con el descubrimiento de América y además hay exposiciones sobre todo esto.

Archivo de Indias

Luego nos bajamos hacia el cauce del río Guadalquivir para ver por fuera la Torre del Oro y cruzar al otro lado para ver el barrio de Triana, el barrio más famoso de la ciudad. Aquí había muchísimo ambiente. Tras callejear un poco por la calle Betis y la calle Pureza y visitar el mercado y la Iglesia de Santa Ana volvimos al otro lado de la ciudad cruzando por el puente de Isabel II.

Triana

A pesar del gentío que había por el centro conseguimos sitio en un restaurante muy majo y tras la comilona nos fuimos a visitar la Maestranza, una de las catedrales del toreo de España.

Plaza de toros de la Maestranza

Cuando salimos de la Maestranza tuvimos suerte de toparnos con una procesión y pudimos verla de bastante cerca. A estas alturas las muchedumbres de gente ya eran exageradas, así que optamos por ir acercándonos a la parada de bus para regresar al camping. Tras darnos una buena caminata y luego estar un buen rato esperando, por despiste perdimos el primer bus que pasó, menos mal que cuando ya estábamos pensando en tomar un taxi pasó otro bus que también iba hacia Dos Hermanas.

Lunes, día 11
En el ecuador del viaje nos tocaba otra vez cambiar de provincia y pasar a Huelva, la cual a la postre sería la provincia que más fondo visitamos.

Nos dirigimos hacia el Rocío, la puerta de entrada del Parque Nacional de Doñana. Este pueblo que tantas veces habíamos visto por televisión debido a su famosísima romería nos sorprendió bastante. Estéticamente es una mezcla del típico pueblo andaluz con paredes encaladas en blanco con el salvaje oeste americano: calles de polvorienta tierra, postes de madera para dejar a los caballos... si a esto le juntamos las marismas de Doñana que llegan hasta las puertas del mismo pueblo convierten a El Rocío en un pueblo muy original.

Nosotros lo primero que hicimos fue hacer el llamado paseo marismeño que nos llevó hasta las inmediaciones del Santuario de Nª Sª del Rocío. Un edificio de considerables dimensiones el cual está rodeado de multitud de locales de las diferentes hermandades de los pueblos de alrededor y de bastantes tienditas de souvenirs relacionadas con la devoción que se siente aquí.

Paseo marismeño

Santuario de Nª Sª del Rocío

Plaza Doñana

 
El Parque Nacional de Doñana es famoso por la gran diversidad de aves que pueblan estas marismas en sus viajes entre Europa y África. La zona central del parque está protegida y para acceder solo es posible mediante vehículos autorizados de empresas que montan visitas guiadas. A mi me pareció que estas visitas eran muy largas e incluso aburridas, así que optamos por visitar la zona periférica a nuestro aire, todos los lugares que queríamos visitar están en la larguísima carretera recta que une el Rocío con Matalascañas.

Empezamos en el Centro de Visitantes de la Rocina. Allí hicimos un sencillo paseo al "Charcho de la Boca" que nos llevó a ver una choza tradicional de la zona junto al centro de visitantes, y también varios puntos de avistamiento de aves. La verdad es que vimos numerosos ejemplares de aves pero no llegamos a identificar claramente ninguno.

Aves de Doñana (I)

Aves de Doñana (II)

Aves de Doñana (III)

 
Luego, mientras Isabel se echaba la siesta yo entré a ver el Palacio del Acebrón, una antigua Casa Palacio de la 2ª mitad del S.XX donde vivió un rico propietario hasta que murió y esto se lo quedó el Gobierno. Hoy es visitable, se puede incluso subir a la terraza para ver las vistas de Doñana. También hay una ruta de senderismo alrededor de un pequeño lago que yo no llegué a hacer.

Palacio del Acebrón

 
El Centro de Visitantes de "El Acebuche" es el mejor preparado. tienen tienda, centro de interpretación, cafetería... Incluso aquí se puede reservar para ver los linces ibéricos que tienen en cautividad, nosotros nos conformamos con verlos en una cámara que emite en tiempo real. También hicimos un sencillo paseo a orillas de la laguna del Acebuche, aquí también hay puntos de avistamiento de aves pero no vimos apenas, vimos muchas más en el Rocío y en el Charco de la Boca.

Punto de observación de aves en la laguna del Acebuche

 
A última hora llegamos a Matalascañas, pueblo a orillas del mar muy turístico aunque demasiado artificial para mi gusto. Allí dormimos en un furgoperfecto. 

Martes, día 12
En Matalascañas hicimos un pequeño paseo de apenas 1,5 Km por el llamado sendero dunar, son un sistema de dunas móviles que hoy por hoy han enterrado parte de por donde iba el sendero oficial así que es un poco complicado de seguir fielmente. 

También nos fuimos al otro extremo del pueblo a ver la zona de la playa de Torre de la Higuera, un viejo torreón que cayó al mar y ahí sigue junto a la playa.

Sendero dunar

Matalascañas

 
Luego seguimos la carretera del litoral para llegar hasta Palos de la Frontera, ya muy cerquita de Huelva capital. Por aquí ya se empezaba a ver muchas fábricas y pabellones industriales. No tenía ni idea de que Huelva era una ciduad tan industrializada.

Palos de la Frontera es famoso porque este es el punto desde donde Colón inició su primer viaje a las Américas. En esta zona se puede hacer la "ruta de los lugares colombinos", son unos cuantos lugares relacionados todos ellos con el descubrimiento de América.

Nosotros aparcamos junto al edificio del foro iberoamericano de la Rábida e iniciamos la visita al lugar más famoso: el muelle de las carabelas. Aquí hay una réplica de las tres famosas embarcaciones: la Pinta, la Niña y la Santa María. También hay mucha información sobre ellas, sobre Colón, y sobre el descubrimiento de América.

Muelle de las Carabelas (I)

Muelle de las Carabelas (II)

 
Tras esperar un rato a que pasara el chaparrón que nos soprendió en los barcos nos dedicamos a ver el resto de lugares: vimos el muelle de la reina donde está el Monumento al Plus Ultra y luego nos dirigimos hacia el enorme Monumento a los Descubridores, en esa zona también está la estatua de Colón y el Monasterio de la Rábida, al que no entramos.

Monumento a los Descubridores

 
Comimos por la zona y luego cruzamos el largo puente que salva el río Tinto y llega hasta la zona de la ría de Odiel. Justo donde se unen ambos paramos a ver otro enorme Monumento dedicado a Colón y donado esta vez por los EE.UU. También me entretuve fotografiando los edificios industriales con cargaderos en la ría.

Monumento a Colón

 
Huelva no era una ciduad que teníamos previsto visitar, pero al final sí que nos cuadró conocerla. Es una ciudad del tamaño de Logroño, sin demasiados atractivos turísticos, pero que sí nos resultó agradable de conocer. Lo más destacado de la ciudad es el antiguo cargadero que usaba la empresa minera de Río Tinto para sacar el mineral que extraía de las cercanas minas y que traían hasta aquí en tren para luego embarcar en cargueros. Es de un estilo que recuerda a la torre Eiffel.

Estatua de Colón en el centro de Huelva

Monumento a la Virgen del Rocío

Embarcadero de la Rio Tinto Company Limited

Para dormir nos desplazamos hasta Minas de Rio Tinto, un lugar que me impactó tanto que le voy a dedicar un artículo monográfico propio.

Miércoles, día 13
La mayor parte del día lo dedicamos a Minas de Rio Tinto pero a última hora de la tarde llegamos a la zona de la Sierra de Aracena, en el norte de Huelva, zona archiconocida por el apreciado jamón de Jabugo. Decidimos pernoctar en Aracena, el pueblo más turístico de la zona. Esa tarde dimos una vuelta hasta la plaza del Marqués de Aracena, su plaza principal donde hay unos cuantos edificios de corte modernista, por ejemplo el casino.

Plaza del Marqués de Aracena

 
Jueves, día 14
A primera hora hicimos el sendero de la molinilla de 3,5 Km a las afueras de Aracena. No nos resultó demasiado interesante pero al menos desperezamos un poco las piernas.

Sendero de la Molinilla

 
A las 11,30h teníamos la visita a la gruta de las Maravillas, el gran actractivo de Aracena. Son las típicas cuevas de origen kárstico en las que lo más original es que estén situadas en medio del pueblo, justo en la base del castillo. Son bastante bonitas y se visitan mediante visita guiada en unos 45'. No se puede echar fotos dentro.

Entrada a la gruta de las maravillas

 
En cuanto salimos de la cueva nos dirigimos a ver el museo del jamón ibérico el cual se ve bastante rápido. 

Museo del jamón en Aracena

 
Tras aprender un poco sobre los cerdos negros y el jamón de jabugo nos dirigimos a la parte alta de Aracena a ver el castillo. Este no tiene mucho para visitar ya que está muy deteriorado, pero las vistas desde arriba son muy buenas.

Subiendo al castillo de Aracena

Tras acabar la visita a Aracena decidimos ir a buscar un sitio para recargar servicios de la furgo, en esta zona tuvimos muchos problemas para encontrar este tipo de lugares. Al final, tuvimos que irnos hasta un camping bastante alejado y antiguo situado en Cortegana.

Viernes, día 15
Este día lo dedicamos a seguir conociendo la Sierra de Aracena. Nos dirigimos hacia Alajar para hacer una ruta de senderismo. Antes de llegar paramos en un par de miradores, uno sobre el pueblo de Alajar situado en la misma carretera y otro en la llamada Peña Arias Montano.

Mirador sobre Alajar

Peña Arias Montano

 
La ruta de senderismo que hicimos nos llevó a lo largo de 5,5Km con un desnivel de 150m desde Alajar hasta el pueblo deshabitado de los Madroños. En el transcurso del camino tuvimos la suerte de ver cerdos ibéricos en un dehesa, los primeros y casi únicos que vimos en todo el viaje, la verdad es que nos hizo mucha ilusión toparnos con ellos. Estuvimos un rato dándoles de comer unas bellotas y haciéndoles un amplio reportaje fotográfico.

Camino entre Alajar y los Madroños

Los Madroños

Cerdos ibéricos (I)

Cerdos ibéricos (II)

Segimos las visitas del día en Almonaster la Real, un pueblo en el listado de "Pueblos más bonitos de España" y en el que lo más interesante es la mezquita que se conserva en la parta alta del pueblo, junto a la plaza de toros.

Interior de la mezquita de Almonaster la Real

Exterior de la mezquita de Almonaster la Real

 
A las 17h teníamos una reserva para hacer una vista guiada a la bodega de jamón ibérico 5 Jotas, en pleno pueblo de Jabugo. En la visita la chica nos enseñó parte de las instalaciones de la enorme fábrica, vimos un audiovisual sobre las dehesas y acabamos haciendo una degustación de jamón de jabugo acompañada de vino de jérez.

5 Jotas es la marca premium de Sanchez Romero Carvajal S.A., así que nosotros decidimos comprar en otra tienda del pueblo menos cara, aunque también compramos de etiqueta negra. Al final nos llevamos embutidos varios y un par de sobres envasados al vacío de jamón y paleta ibérica.

En cuanto al pueblo de Jabugo comentar que no tiene nada visitable. nosotros dimos un paseo por la calle Barco hasta la plaza principal y luego tras la compra del embutido enseguida nos fuimos.

 

Calle Barco en Jabugo

Bodega 5 Jotas en Jabugo

Tras irnos de Jabugo decidimos acabar también con la visita a Andalucía e ir volviendo hacia casa tranquilamente aunque haciendo varias paradas en el trayecto. Esto lo explico en la siguiente entrada de continuación del viaje.