Se encontró en los años 80 en un estado realmente lamentable para nada parecido al que presenta ahora totalmente restaurado desde 1994.
Se llega a él desde unas pista que se coge en la carretera que lleva de Viana a Aras; hay gente que estos 4,5Km de pista los hace caminando pero se puede hacer perfectamente en coche circulando despacio. Nosotros hicimos esto último y dejamos el coche en un pequeño parking a apenas 1 Km del hipogeo; luego, mediante un sencillo paseo llegamos a este el lugar señalizado con un panel explicativo; en el camino hay postes señalizadores que lo marcan.
Hipogeo de Longar
Antes de irnos del parking dimos otro pequeño paseo hasta la Ermita de Pisana, situada muy cerquita aunque nos costó llegar porque inicialmente intentamos subir por una ladera muy empinada y tuvimos que recular a buscar una pista que subía en mejores condiciones.
La ermita en sí apenas tiene atractivo ya que más parece un corral que un lugar religioso.
Ermita de Pisana
Para acabar la mañana paramos en Viana y nos dimos una vuelta por este pueblo medieval en el que hace tiempo que no estaba.
En Viana destacan las Iglesias de Santa María y la de San Pedro. En la primera y más grande, a pie del templo, descansan los restos de César Borgia; la iglesia está situada junto a la plaza de los fueros y el Ayuntamiento, el auténtico corazón de la villa. La segunda está en ruinas pero aún así merece la pena visitarla; junto a ella hay un parque con buenas vistas hacia los alrededores de Viana.
Ayuntamiento de Viana
Iglesia de San Pedro
Iglesia de Santa María