domingo, 13 de mayo de 2018

Tachando montes centenarios en Guipuzcoa (II)

Este fin de semana lo he aprovechando para acercarme a Guipuzcoa para hacer un par de rutas de senderismo que me han servido para conseguir cuatro cimas centenarias más de esta provincia. Hace unos años ya hice un viaje parecido con similar intención. Tras estas cuatro todavía me faltan 60 del total de 112.
Me trasladé a la zona del valle del Deba el sábado a la mañana y lo primero que hice fue darme una vuelta por Soraluze, o Placencia de las Armas en Castellano. Se trata del típico pueblo industrial del interior de Guipuzcoa encajonado en un estrecho valle lo que hace que el pueblo solo haya podido crecer básicamente a lo largo del rio Deba, el resto está desperdigado por caseríos en las laderas de la montaña.

Soraluze (I)

 Soraluze (II)

Después crucé el puerto de Azkárate para cambiar al Valle del Urola. Una vez allí hice una parada en el Santuario de Loiola el cual ya conocía de viajes anteriores. Visité el interior de la Basílica y también me di una vuelta por los jardines que hay en la parte trasera, un lugar perfecto para dar un paseo tranquilo en soledad en plan de meditación.


 Basílica de Loiola por delante

 Basílica de Loiola por detrás


La siguiente parada fue en Zestoa, un pueblo famoso por su balneario y por las cuevas de arte rupestre de Ekain. El balneario solo lo vi de pasada desde la carretera (está en las afueras del pueblo) pero sí que fui a visitar la cueva, bueno mejor dicho la neocueva, ya que al igual que lo que ocurre en Altamira la cueva original se encuentra cerrada al turismo para intentar preservarla lo máximo posible.

Para la visita a Ekain lo priemro que hay que hacer es ir a la oficina de turismo del pueblo para comprar la entrada; la visita solo puede ser guiada y hay horarios en Euskera y otros en Castellano así que conviene informarse antes de llegar. Una vez con la entrada en la mano hay que recorrer un camino de algo más de 1 Km para llegar hasta el museo donde está neocueva, en las afueras del pueblo. En el camino también se pasa por el Palacio de Lili, otro edificio histórico importante de Zestoa.
Cuando yo llegué al museo todavía me sobraba tiempo así que seguí adelante con intención de ver la entrada a la cueva original aunque no llegué a encontrarla; también aproveché para ver el museo antes de la visita guiada.
La visita guiada duró algo más de media hora y en ella te van enseñando todas las partes importantes de la recreación de la cueva original la cual se supone que guarda muchas similitudes con esta. Si en Altamira el animal omnipresente es el bisonte en Ekain este se sustituye por la figura del caballo.

Palacio de Lili en Zestoa

 Entrada a la neocueva de Ekain

Tras la visita a Ekain me di una vuelta por el casco viejo de Zestoa el cual se ve en apenas un cuarto de hora y luego me metí en una Taberna a comer.

Por la tarde me trasladé hasta el valle colgado de Aizarna para hacer una ruta por las montañas que rodean este precioso valle.

Caseríos en las afueras de Aizarna

 Valle de Aizarna

Para pernoctar decidí hacerlo en el parking que hay habilitado en Zestoa para visitar las cuevas de Ekain, un lugar que me había parecido bastante tranquilo por el día.

El Domingo me moví hasta Zarautz para hacer otra ruta, más dura que la del día anterior, y que me llevaría a conocer las montañas de los alrededores de Zarautz.

Vistas hacia Urdaneta

Vistas hacia Zarautz

 Ferería de Agorregi