lunes, 17 de abril de 2017

Un día para visitar lugares abandonados

El viaje de Semana Santa tocaba a su fin, ya tocaba volver para Logroño, pero conseguimos cerrar el último día de una manera muy entretenida. Al regresar nos desviamos ligeramente para visitar dos lugares abandonados que tenía apuntados desde hacía tiempo para intentar colarme dentro de ellos.El primero de ellos está en Segorbe y este más o menos nos pillaba de paso ya que por Segorbe pasa la A-23, la autovía Mudéjar por la que íbamos a regresar. Se trata de una antigua fábrica de muñecas de porcelana situada en la zona de huertas de las afueras del pueblo.

El edificio fue un convento antes de la Guerra Civil, una fábrica textil después y finalmente un taller de creación de muñecas de porcelana. En dicho taller trabajaron, el escultor y porcelanista Ramón Inglés y su hermana Josefina hasta la muerte del primero, momento en el que tanto el mal estado del edificio como la bajada de las ventas terminaron con el negocio.

Nosotros el edificio lo encontramos por suerte ya que nos lo íbamos pasar de largo puesto que yo pensaba que estaba más adelante pero al ver moldes para las muñecas por la ventana rectificamos. Para entrar nos colamos por la parte superior, por una especie de acueducto, luego vimos que había otra entrada más fácil, por donde entramos nosotros había riesgo de caída.

Comentar también que si alguien quiere visitar el lugar ya se puede dar prisa ya que acaba ser declarado en ruina; el edifico ha sufrido ya varios derrumbes, uno muy reciente que ha acabado por propiciar este hecho. Cuando nosotros estuvimos todavía se podía acceder bien pero la nave central estaba derrumbada del todo, casi todo lo que se puede visitar está en los pisos altos, en la planta baja está casi todo caído.

Fábrica de muñecas de porcelana de Segorbe (I)

 Fábrica de muñecas de porcelana de Segorbe (II)

Fábrica de muñecas de porcelana de Segorbe (III) 

Fábrica de muñecas de porcelana de Segorbe (IV) 

Fábrica de muñecas de porcelana de Segorbe (V) 

Fábrica de muñecas de porcelana de Segorbe (VI)

Más adelante todavía hicimos otra visita, esta vez a la Central Térmica de Aliaga, provincia de Teruel. Para llegar aquí sí que nos tuvimos que desviar algo más de la autovía. Eso sí, tanto encontrar como acceder a esta lugar es muy sencillo ya que está cerca del pueblo que lleva su mismo nombre y para entrar solo hay que pasar la valla que ya está caída.

La Central Térmica de Aliaga empezó a funcionar en el año 1949 bajo propiedad de Eléctricas Reunidas de Zaragoza, luego integrada en Endesa. Se estuvo alimentando del carbón que se extraía en las minas de la zona trayendo bastante prosperidad a esta zona rural; así fue hasta el año 1982 en el que echó el cierre por no ser suficientemente productiva.

Ahora mismo la central está dejada de la mano de Dios y la verdad es que es una delicia de lugar tanto para los aficionados a la fotografía como para los interesados en viejos edificios industriales. El edificio tiene cierto aire soviético y tremendamente decadente. También llama la atención su emplazamiento, en un lugar donde uno no se espera encontrar un edificio así: en mitad de la nada junto a un embalse donde se recogía el agua para refrigerar la central.

 Central Térmica de Aliaga (I)

Central Térmica de Aliaga (II)

Central Térmica de Aliaga (III)

Central Térmica de Aliaga (IV)

Central Térmica de Aliaga (V)

Central Térmica de Aliaga (VI)

Central Térmica de Aliaga (VII)

Central Térmica de Aliaga (VIII)

Central Térmica de Aliaga (IX)

Central Térmica de Aliaga (X)