domingo, agosto 27, 2006

Fin de semana accidentado en Hondarribia

Mi suegra había sugerido en las últimas semanas su deseo de acercarse a la playa unos días, como yo la había pisado un sólo día en todo el verano, me pareció una buena idea. La playa elegida fue la de Hondarribia, ya que si salía mal tiempo (había riesgo), podíamos pasar el finde visitando el pueblo.
El viaje empezó mal ya el viernes, ya que nada más salir en el polígono de Cantabria un viejo se me ha cruzado sin mirar en medio de la carretera y he tenido que pegar un frenazo del copón para evitar chocar contra él. Eso lo he evitado gracias sobretodo al ABS, lo malo ha sido que la furgoneta que venía detrás mío parece que no tenía ABS y ese golpe sí que me lo he comido. Tras venir la guardia civil la cosa ha quedado en que a pesar de que el viejo asumía su culpa, parece ser que el que pega por detrás siempre paga por el hecho de no mantener la distancia de seguridad correcta. Ya me enteraré de quien paga de los dos, el que está claro que no va a pagar soy yo... Afortunadamente sin secuelas físicas y con sólo un pequeño golpe de chapa en la parte posterior del Focus hemos seguido nuestro rumbo.
Pero esto no iba a ser todo, parece que hoy no era mi día; al llegar a Oiartzun, mientras buscábamos el dichoso camping donde íbamos a alojarnos, he pasado cerca de unos coches aparcados y he roto el retrovisor contra uno de ellos, ya se sabe que las desgracias nunca vienen solas.

Mi forito

Bueno, hablando ya del alojamiento, como son malas fechas lo mejor que hemos encontrado en relación cercanía-calidad-precio ha sido una mobil-home en un camping de Oiartzun. Esto de las mobil-home era nuevo para mi, pero bueno, básicamente es una mezcla entre un bungalow y una autocaravana.



La mobil-homeEl camping Oliden

El camping era bastante txabakano, un poco marginal y la mobil-home a mi personalmente no me desagradaba demasiado, pero Juli, mi suegra, dijo que no soportaba el olor a desague que había y así se lo ha comunicado al encargado del camping, total que la noche del sábado ya la hemos pasado en otra mobil-home bastante más amplia, y lejos del hedor.

El sábado ha salido malo así que hemos estado viendo Hondarribia por la mañana. Por la tarde, ya hemos cruzado el Bidasoa en barquita y hemos estado en Hendaia. En Hondarribia ya había estado hacía un par de años pero me ha vuelto a sorprender, la verdad es que es un pueblo muy atractivo. Lo más destacado me sigue pareciendo el barrio pesquero, con sus casitas pintadas de colores cálidos; y el casco viejo, encerrado en su antiguo recinto amurallado. De Hendaia no hemos visto más que la playa, ya que el pueblo está muy separado de la zona marítima y la barquita que cruza a la gente te deja en esta última.
De Hendaia hemos vuelto pronto al camping, como faltaba rato todavía para anochecer hemos aprovechado para dar una paseíllo por el camping y echar unas manos al "chinchón" en el porche de al nueva "mobil-home".

Hoy, sorprendentemente nos ha salido muy buen día y sabiendo como se las gastan las tormentas por aquí y el mal tiempo que suele hacer, hemos procedido a ir directamente y sin más dilación a la playita de Hondarribia. Tras la mañana playera y una copiosa comida, hemos visto el Cabo de Higuer (que no tiene nada especial) y ya hemos vuelto hacia Logroño. Hemos aprovechado para cojer la carretera que sube al monte Jaizkibel para visitar la ermita de Santa Guadalupe, patrona de Hondarribia y el mirador próximo a la cima del monte, desde aquí hay una vista impresionante de toda la comarca de Irún-Hondarribia-Hendaia-Oairtzun.



Bahía de TxingudiBarrio de pescadores


Entrada al casco viejoBarquita que cruza el Bidasoa


CruzandoPlaya de Hendaia

Jaizkibel

martes, agosto 15, 2006

Turismo por Burgos

Hoy he estado haciendo un poquito de turismo rural, que siempre viene bien, con la novia y la suegra. Ya se que a simple vista por el hecho de llevar a la suegra no parece un gran plan, pero nada más lejos de la realidad, yo me llevo muy bien con ella.
Como el hombre del tiempo ha dado malo por toda la cornisa cantábrica y conociendo mi afición por viajar siempre hacia el norte se me han trastocado un poco los planes, pero bueno, esta vez Edith se ha encargado de buscar una rutilla por tierras castellano leonesas, más concretamente burgalesas. Bueno, el plan ha sido el siguiente:
Primero, antes de nada, llegar tarde a buscar a la suegra ( de ahora en adelante Juli, que parece mal referirse a ella como "suegra"), como siempre pasamos a recogerla tarde por su casa, cerca de media hora esta vez, la verdaz es que no se como sigue queriendo ir con nosotros a ningún sitio, ¡vaya paciencia!
El primer destino eran las famosas lagunas de Neila, tenía mis dudas de si ir por la nacional N-120 de Burgos o por la comarcal C-113 de Canales de la Sierra. Al final me decanté por la última opción ya que al ser sábado teníamos altas posibilidades de coincidir con un gran número de camiones que pasan todos los días por la N-120. En qué hora elejí ir por dicha comarcal..., ya no recordaba lo mala que es esta carretera ya que hacía mucho tiempo desde la última vez que pasé por este camino de cabras. Tras muchísisimas curvas y mareos de Juli por fin atravesamos las siete villas y llegamos a la lagunas de Neila. Estuvimos en un mirador que hay justo antes de llegar y viendo sólo dos de las lagunas: la larga y la negra



Vistas desde el miradorLaguna negra
Laguna larga

Luego nos acercamos a Silos para ver el famoso monasterio benedictino de Santo Domingo de Silos. Allí, después de hacer la correspondiente cola, nos iban cojiendo en grupos de unas 30 personas y el guía nos iba empujando rápidamente para acabar viendo únicamente el claustro y un par de salas de todo el monasterio, una verguenza.



Por fuera

Por dentro


Tras salir del monasterio vimos que todavía teníamos tiempo, así que nos acercamos al desfiladero de la Yecla, un pequeño cañón excavado en la roca, bastante bonito pero como ocurre con tantas cosas, demasiado masificado de gente.



Desfiladero (1)Desfiladero (2)