domingo, enero 30, 2011

En raquetas hasta las Cascadas de Puente Rá

Las Cascadas de Puente Rá es uno de los sitios más espectaculares del ya de por sí espectacular Parque Natural de Cebollera. Eso sí, verlas completamente heladas en invierno es ya una pasada.

 Carámbanos gigantes

La travesía para llegar hasta las Cascadas la hemos relizado usando raquetas de nieve; la verdad es que es la primera vez que me pongo un artilugio de estos. Son útiles cuando hay mucha capa de nieve blanda ya que impiden el que te hundas. Eso sí, no sirven para hielo, en ese caso no nos quedará más remedio que usar crampones.

Conseguimos dos pares de raquetas expresamente para realizar la travesía, uno lo alquilé en Sherpa , el Club de Montaña al que pertenezco y el otro nos lo dejó una compañera de trabajo. Los modelos que hemos usado están muy bien ya que tienen unas cuchillas de acero en la parte delantera para agarrar en caso de nieve dura y también un "alzatalones" detrás para hacer las subidas más cómodas.



Luciendo raquetas (I)

Luciendo raquetas (II)

La ruta que hemos realizado ha sido de un total de 11Km, aunque no hemos llevado las raquetas puestas todo el rato. Hemos salido desde el área recreativa de la Achichuelo, muy próxima a Villoslada de Cameros.
Hay una ruta balizada para llegar hasta las cascadas dentro de las séis que completan los recorridos por Cebollera, pero no hemos podido hacerla ya que para ello había que subir con el coche hasta la Ermita de Lomos de Orio y la verdad es que la carretera no estaba para muchas alegrías, ya nos ha costado Dios y ayuda llegar hasta la Achichuelo.



Nuestras pisadas con las raquetas puestas

Cortafuegos

Rojo y blanco

Más nieve no podía haber

Cáscadas de Puente Rá (I)

Cáscadas de Puente Rá (II)

sábado, enero 22, 2011

Helada en el Oderiaga

A pesar de las bajas temperaturas que daban hoy he hecho una travesía por la zona del Parque Natural del Gorbea.

Abajo no se estaba mal pero arriba, en la cima del Oderiaga, el GPS me marcaba -9ºC. A pesar de todo me he echado el cigarrito de rigor en la cima, eso sí a poco me quedo allí como una estatua de hielo.

Como se puede ver en las fotos, a pesar de que no había nieve, la niebla y la escarcha ofrecían un ambiente bastante "polar".


La cima del Oderiaga tapada por la espesa niebla

El ambiente se presenta duro

El viento del norte hace estragos (I)

El viento del norte hace estragos (II)